Métropolitain

Odio el metro, lo odio con todas mis fuerzas. No lo soporto. Las estaciones son un agobio: unos corriendo de un lado para otro con cara de pocos amigos, otros vendiendo fruta en cada esquina con bastante mala pinta, luego está el típico pesado que no te deja pasar cuando la que tienes prisa eres tú, las estaciones huelen mal, están sucias y encima viejas, muy viejas. Y ya cuando logras montarte en el metro después de atravesar tropecientosmil pasillos, encuentra sitio... ¡logra encontrar sitio! Porque esa es otra... ¡siempre va hasta la bandera!

Por eso, porque el metro me pone de muy mal humor, siempre que puedo intento o bien ir andando o bien coger un bus; para mí la mejor opción para moverte por París. El servicio de los autobuses en París es buenísimo, llega a todas partes, tiene mucha frecuencia, es rápido y encima están bastante nuevos y limpios. Además, vas viendo la ciudad y no metida en un túnel.
Pero bueno, no me voy a poner yo ahora quisquillosa porque la verdad es que en cuanto a rápido no hay nada más rápido que el metro. Así que, aquí vienen algunas cosas buenas que tiene el metro y que, si vienes a París, merece la pena prestarles atención.

Estación Arts et Metiers, Línea 11.
¡Mi favorita sin ninguna duda!

Estación Franklin D. Roosevelt. Línea 1.

Estación Louvre-Rivoli

Casi todas las estaciones de metro de París están cortadas por el mismo patrón: ladrillo blanco, anuncios y carteles azules; pero de repente, igual te asomas por la ventana y te encuentras con alguna como estas.

Y si no... a lo mejor tienes suerte y alguien está tocando La vie en rose. 

Precio ticket metro, bus y tranvía: 1,70€

Ce.